Reseña: Nightflyers - George R.R. Martin.

Publicada por primera vez en abril de 1980 en la revista Analog Science Fiction and Fact, Nightflyers es una novela corta de George R.R. Martin, mezcla de ciencia ficción y "terror" que gracias a su serie homónima de Netflix nos ha venido reeditada por Gigamesh en un único tomo muy cuidado. De unas 200 páginas, en tapa dura, con un tamaño de 20x14 centímetros y lleno de ilustraciones que corren de la mano de David Palumbo este pequeño tomo hace las delicias de los coleccionistas. Así mismo la portada y guardas es obra de nuestro ya conocido Enrique Corminas. Otro lugar en el que podéis encontrar esta novela corta es en Híbridos y Engendros, que agrupa varias historias del autor y también editado por Gigamesh.

Ganadora del premio Locus de 1981 y nominada a os premios Hugo de mejor novela corta. También ganó el Premio Seiun en Japón a la mejor novela extranjera.

La historia trata sobre un grupo de científicos y un joven telépata que viajan a bordo de la Nightflyers, una nave capitaneada por un hombre solitario. Todos ellos viajaran con la esperanza de encontrar otros tipos de vida alienígena (puesto que aquí ya se conocen otros tipos de vida extraterrestre) concretamente a los llamados Volcrym. A los cuales explican como una raza de viajeros interestelares, que viajan en naves que van más despacio que la luz, y que vienen desde el corazón de la galaxia. Lo cual resulta desconcertante ya que todas la razas conocidas ya han conseguido viajar a la velocidad de la luz. Esta particular característica hace a estos seres más interesantes todavía, ya que que podríamos estar hablando de una raza casi inmortal o que, al menos. son capaces de vivir durante millones de años, puesto que no han necesitado de una tecnología que los haga viajar más deprisa. Así mismo todas la civilizaciones conocidas tienen vagas referencias a los Volcrym y eso llevará al científico Karoly D'Branin a interesarse, casi de manera obsesiva, por ellos. En su investigación descubre los Volcrym están pasando por  lo que podríamos llamar el filo del domino humano,  lo cual le impulsará a crear esta expedición para encontrarlos.

La trama, al ser tan corta está muy bien hilada, apenas tiene escenas de transición entre pasaje y pasaje, el ritmo y la acción son constantes. Así mismo el concepto de la Nightflyers como elemento dotado de consciencia propia es muy acertado puesto que es lo que moverá a los personajes y los mantendrá en un estado constante de alerta. Todo esto permite que nos encontremos así un personaje el cual no conocemos pero del que iremos averiguando cosas a medida que avance la trama. La desesperación comenzará hacer presa a nuestro grupo de intrépidos científicos. Se nota también, y mucho, la buena pluma que tiene Martin para crear estructuras y ambientes que se van enrareciendo poco a poco, el como con tan poco espacio es capaz de dar unas descripciones tan exactas haciéndonos recrear todo un universo en nuestras mentes. Podríamos decir también que más que una novela de terror se trata de un ensayo sobre el transhumanismo (corriente de pensamiento que trata sobre cómo impactará la tecnología en el futuro de la humanidad) y es que una nave con consciencia propia... el concepto en el que está basado es de lo más interesante y dota a la historia de esa tensión que será palpable durante todo el relato.

Y es que, a medida que la Nightflyers vaya avanzado en su travesía los personajes comenzarán a sentirse observados e inquietos y algunos de ellos comenzarán a desarrollar ciertas capacidades que provocarán el miedo entre sus compañeros de viaje. Todo ello desencadenará tensiones y recelos haciendo que no confíen los unos en los otros. Las tensiones y el miedo comenzarán a inundar la nave, y la paranoia y desconfianza formará el caldo de cultivo para que unos se pongan en contra de otros y cunda el pánico entre la tripulación.

Bajo estas premisas, podemos decir que estamos ante una novela de corte psicológico. Los personajes son tan dispares que en ocasiones hacen que estos carezcan de humanidad. Y es que encontramos desde humanos que han sido modificados genéticamente para vivir mejor en condiciones de ingravidez y de máxima presión, hasta otros que han modificado su cuerpo para poder conectarse directamente a los ordenadores de abordo. Y es por estos aspectos, entre otros, por los que podemos decir que se trata de un relato psicológico y transhumanista, ya que esta falta de emoción y empatía entre personajes dará como resultado que todas las acciones y decisiones que tomarán los protagonistas las harán en base a la emoción más primaria: el miedo. La sensación de perdida del control de los protagonistas los hará tomar decisiones con funestas consecuencias.

En resumidas cuentas catalogar esta novela como de terror considero que es erróneo. Si es cierto que hay momentos que pueden resultarnos gores o en los cuales podemos palmar el miedo a morir que tienen los protagonistas, pero a grandes rasgos podemos considerar más bien una obra que trata sobre el miedo a lo desconocido o a lo inexplicable.